“The Ghost of the Shell” es el fantasma en la concha, es
decir: al espíritu, el alma, el ente, la consciencia que habita en la inteligencia
humana, y también –en términos de Ciencia Ficción- en los cibercerebros
avanzados, y que incluso puede ser transferido o implantado en cuerpos
artificiales, conservando la personalidad y los recuerdos de su original. Se
plantea también si ese "ghost" podría estar presente en robots inteligentes
completamente sintéticos.
Se podría traducir como “Complejo Independiente”, es decir casos independientes policíacos tratados por la Sección de Seguridad pública nº 9 o simplemente «Sección 9», especializada en crímenes tecnológicos.
La protagonista es la Mayor Motoko Kusanagi, un sensual cuerpo artificial con mente humana.
La primera temporada de Stand Alone Complex se divide en dos partes, en la primera son capítulos autoconclusivos, a mitad de temporada aparece el "El hombre que ríe" y la serie se convierte en una historia de continuación. El personaje de "El hombre que ríe” se basa en la novela “El guardián entre el Centeno” de J. D. Salinger.
La segunda temporada es mucho más negra y ambientada en la trama de "los 11 individuales", varios atentados terroristas, un servicio de inteligencia que conspira, y el enfrentamiento entre el gobierno japonés y los refugiados asiáticos de la Guerra Mundial.
En el último capítulo de la primera temporada se hace referencia a la famosa novela de múltiples interpretaciones de J.D. Salinger.
¿Se acercaran las máquinas inteligentes a los melodramáticos dilemas de "El
Guardián entre el Centeno"?, esa es la pregunta que subyace:
"¿Te has hartado
alguna vez de todo? - le dije -"
"...muchas veces me imagino que hay un montón de niños jugando en un campo de centeno. Miles de niños, y están solos, quiero decir que no hay nadie mayor vigilando. Solo yo. Estoy al borde del precipicio y mi trabajo consiste en evitar que los niños caigan en él. En cuanto empiezan a correr sin mirar adónde van, yo salgo de donde esté y los cojo. Eso es lo que me gustaría hacer todo el tiempo. Yo sería el guardián entre el centeno"
"...muchas veces me imagino que hay un montón de niños jugando en un campo de centeno. Miles de niños, y están solos, quiero decir que no hay nadie mayor vigilando. Solo yo. Estoy al borde del precipicio y mi trabajo consiste en evitar que los niños caigan en él. En cuanto empiezan a correr sin mirar adónde van, yo salgo de donde esté y los cojo. Eso es lo que me gustaría hacer todo el tiempo. Yo sería el guardián entre el centeno"
“Me alegro de que
inventaran la bomba atómica: así si necesitan voluntarios para ponerse debajo
cuando la lancen, puedo presentarme el primero”