miércoles, 20 de octubre de 2021

El viajero en la Isla de Creta (by Bruno Alfonso)

 

Here Tzermiado.

Ayer fue un día duro para el viajero, cansancio y sueño, sueño y cansancio tras kilómetros en coche a Barcelona y muchos más en avión hasta Heraklion, luego un Fiat Tipo, un bocadillo y circular a Tzermiado entre nubes. En la senda, varios pueblos pintorescos en un recorrido circular por Lassiti. Eran villas pequeñas, donde encontramos bares antiguos al estilo griego y mucha paz en sus calles. Los viajeros subieron a ver la cueva de Zeus y empezó la tormenta, tal vez Zeus sea caprichoso y no quiera ser molestado, aun así, ascendimos cuarenta minutos hasta la entrada, pero Zeus siguió en su obstinación y encontramos la cueva cerrada a las visitas por peligro de terremotos, aunque los viajeros no hallaron rastro alguno de su ira en las piedras y en ningún sitio.

Los viajeros toparon con un monasterio en el camino, totalmente abierto y sin monje alguno que vigilase nada. Ahí están las fotos.

Los viajeros volvieron a Tzermiado a cenar especialidades cretenses de Argualides, entre las montañas, a más de mil metros de altura, refresca a la noche, el cielo nublado cubre está fértil meseta y por fin descansamos.